Contenidos
A través del portal japonés AERADOT, se publicó un artículo analizando el “sistema de comité de producción” implementado en la industria del anime en Japón, señalando las ventajas y amenazas de los estudios de animación, debido a que no pierden o ganan si la serie es exitosa o no.
La industria del anime continúa dando grandes pasos con los éxitos de «Kimetsu no Yaiba», «Jujutsu Kaisen» inclusive «Shingeki no Kyojin». El éxito cinematográfico de «Kimetsu no Yaiba» , franquicia que superó el récord de ingresos de taquilla con más de 40 mil millones de yenes en Japón y, debido a que la calidad de animación de la segunda temporada superó a su predecesora, atrajo la atención en Twitter denominándolo como «Animación de Calidad».
Pero eso no es todo, el anime ahora está formando un mercado más grande que los dramas y películas fuera de Japón, eso se refleja en las ventas de paquetes de video como DVD y Blu-ray, aumentando el prestigio de la propia animación. Según una encuesta de la Asociación de software de video de Japón, las ventas de paquetes de video en 2020 fueron de 137,1 mil millones de yenes, de los cuales la animación representó el 22,1% del total, solo superada por el 33,4% de la industria musical (música japonesa).
Japón y su influencia en los medios de streaming
Incluso con los servicios de distribución de videos como Amazon Prime y Netflix, no es raro ver que el anime ocupe un lugar destacado en el ranking de visualización. El tamaño del mercado de la industria del anime, que estima la cantidad pagada por los consumidores, también alcanzó los 2.426,1 mil millones de yenes, el segundo más alto de la historia, a pesar de haber sido golpeado por la pandemia. El anime es una parte indispensable del mercado del entretenimiento mundial.
Ahora bien, no todo es de color de rosa, enfocándonos en la industria del anime en su conjunto, lo cierto es que la situación sigue siendo desalentadora. La cantidad de producciones de animación en TV alcanzó un máximo de 361 en 2016 y va disminuyendo con un 278 en 2020. Según una encuesta de Teikoku Databank, el 37,7% de los productores de anime estaban en números rojos y el 29,5% estaban perdiendo sus utilidades. Alrededor del 70% de las productoras de animación siguen en recesión. Por otro lado, el 31,1% de las empresas, principalmente las grandes productoras bendecidas con obras de éxito, han aumentado sus beneficios y monopolizando la industria en Japón.
Por otra parte, las dificultades financieras de los estudios en Japón se debieron al COVID-19, por consecuencia, provocó aplazamientos en la producción y el atraso de las emisiones. Durante la primavera y el verano de 2020, la declaración del estado de emergencia perjudicó la producción de varios animes, como “Sazae-san” y “Pokemon”, viéndose forzados a retransmitirlos o aplazarlos. También se aplazaron muchas producciones cinematográficas, como la película de animación de Kyoto Animation, “Violet Evergarden the Movie”, “Detective Conan” y “Evangelion: 3.0+1.0 Thrice Upon a Time”.
El comité de Producción y su influencia
En Japón, generalmente se dice que la producción de una animación cuesta entre 15 y 30 millones de yenes por episodio. Entonces una temporada (3 meses, 12 a 13 episodios) puede alcanzar o superar el monto de 100 millones de yenes . Por eso, el problema podría perjudicar a la productora de animación que no puede obtener más fondos que el costo de producción, a menos que invierta el comité de producción indiferentemente del éxito de ésta.
Dado que es difícil para una compañía de producción cubrir este fondo de producción por sí sola, algunas compañías dentro y fuera de Japón como las estaciones de televisión, los editores, las agencias de publicidad, las compañías cinematográficas, los productores de música, etc., invierten capital para formar una organización llamada Comité de producción con el objetivo de afrontar los costos de producción. Si la obra es un éxito y las ventas de Blu-ray y productos están en números negros, las ganancias se distribuirán entre las empresas que son miembros de este comité de producción.
Por ejemplo, en el caso de grandes estudios de animación como Ufotable para “Kimetsu no Yaiba” o MAPPA para “Jujutsu Kaisen”, el estudio de animación también invierte en el comité de producción y se beneficia del éxito de la franquicia. Ahora bien, en la mayor parte de los casos, el estudio no forma parte del comité de producción y no puede recibir más que los fondos de producción. Este sistema se conoce como “sistema de comité de producción” y puede parecer desventajoso para los estudios de animación.
Sin embargo, la oportunidad que brinda este método es que el estudio de animación no tiene que asumir las pérdidas a pesar de que la animación no genere éxito. Se dice que la probabilidad de que una animación dé utilidades es de una entre diez, por lo que es un riesgo que los estudios asuman ellos mismos los costes de producción.
El sistema de comités de producción ha provocado un aumento de animaciones lo que genera más oportunidades de trabajo dentro y fuera de Japón
Sin embargo, el éxito inesperado de las animaciones que producen es algo que aún están tratando de controlar. Razón por la cuál, algunos estudios de animación hayan quebrado, aunque hayan tenido éxitos en el pasado. Este método de producción de animación también perjudica la producción de animes originales sin una historia de origen.
Los estudios con recursos financieros limitados reducen el riesgo de invertir en comités de producción, por lo que las únicas animaciones que financiarán serán las que tengan posibilidades de ser un éxito. Y el mejor ejemplo de una obra que se espera que sea un éxito incluso antes de que se convierta en anime es una obra original basada en un manga que ya ha sido un éxito, como “Kimetsu no Yaiba” o “Jujutsu Kaisen”.
Sin embargo, el número de este tipo de producciones es bastante limitado, y generalmente son realizadas por los grandes estudios. Lo que demuestra la gran diferencia entre los “ganadores” y los “perdedores” en la producción de animación. Ciertamente, la mayor parte de los estudios, cuenta con personal capaz de producir obras tan buenas como las basadas en el manga. Sin embargo, si la animación es una obra original sin antecedentes, es complicado conseguir el apoyo económico para la producción.
En Japón, se considera que las animaciones basadas en los mangas deben ser lo más fiel posible a la obra original, ya que el éxito de ambas se encuentra en juego. En consecuencia, produce que los artistas tengan limitaciones para demostrar su propio estilo de animación.
Difundido por: Anime Online Sub
Fuente original ANMO Sugoi