Probamos Mario & Luigi Brothership y es fantástico

Mario & Luigi Brothership es uno de los nuevos lanzamientos de Nintendo Switch, sin duda un juego magistral de combate y espectáculo visual, lastrada por un mundo olvidable, personajes excesivamente habladores y una progresión frustrantemente lineal.  

Mario & Luigi Brothership obra sin igual

Cuando no se interpone en su propio camino, Mario & Luigi Brothership es muy divertido. Las peleas requieren concentración, los enemigos son atractivos y el juego hace un excelente trabajo al introducir gradualmente nuevas mecánicas que agregan capas de estrategia.

Mario & Luigi Brothership comienza con Luigi siendo perseguido por un enjambre de abejas. Accidentalmente, se precipita por un acantilado, Mario lo atrapa antes de que caiga y ese acto de heroísmo abre un portal que succiona a los fontaneros hacia una dimensión desconocida. Mario aterriza solo en una isla y, después de un poco de plataformas introductorias y una pelea o dos, sigue al fantasma de Luigi a una isla gigante en movimiento llamada Shipshape, donde Luigi le devuelve el favor y salva a Mario de caerse de un acantilado. No tiene sentido y eso está bien. 

En Shipshape Island, conocerás a Connie, una residente con una cara que parece un enchufe eléctrico y que vive en Concordia. La tierra alguna vez estuvo unida por un gran árbol que fue destruido por una fuerza misteriosa, dejando los diferentes reinos de Concordia flotando en el mar como islas. Mario y Luigi acuerdan ayudar a reconectar cada isla y zarpan. Antes de que los fontaneros puedan explorar y conectar cada isla, primero tienen que encontrarlas. 

En Mario & Luigi Brothership navegar por los océanos desde Shipshape Island consiste en abrir un mapa y seleccionar una corriente por la que navegar. No hay nada que explorar más allá de estas pistas lineales y el proceso es dolorosamente lento. La idea es que corras para completar misiones secundarias mientras el barco se abre camino de un punto de interés a otro, pero el juego es tan largo (y las recompensas por estas misiones secundarias tan insignificantes) que después de más de 30 horas no iba a perder más tiempo en ellas. 

Afortunadamente, obtienes una mejora de velocidad muy al principio de la campaña. Cuando te acercas a un arrecife o a una isla desconocida, Shipshape reducirá automáticamente la velocidad y les dará a Mario y Luigi tiempo suficiente para correr hacia el telescopio/cañón que está en su extremo derecho. Desde allí, puedes ver la isla en el horizonte y disparar a los fontaneros como si fueran balas de cañón hacia su objetivo. 

Estas animaciones son increíblemente divertidas. Mario siempre cae de pie mientras Luigi lucha por mantenerse en pie, chocando contra las paredes o cayéndose en una comedia clásica. Cada isla tiene su propia animación única y, con el tiempo, los aterrizajes de Luigi mejoran, lo que es un detalle adorable. 

La isla Rumbla fue una de mis primeras favoritas. Es el hogar de artistas cuyas creaciones son destruidas una y otra vez por un hombre sin talento que solo quiere algo de atención. También hay una entrañable (aunque poco original y larga) historia de amor contada en tres islas que juegan con la dualidad del fuego y el hielo: la isla Heatfreeze, la isla Skorcheen y la isla Slippenglide. 

Mario y Luigi no tienen líneas de diálogo, pero balbucean algo parecido a italiano en conversaciones que suelen ser demasiado largas. En un juego de rol de Mario se espera mucha lectura, pero sentí que estuve presionando el botón de avance rápido y pulsando el botón siguiente durante demasiado tiempo. El guion en sí es sólido, por lo que si buscas un juego con una narrativa y jugabilidad increíble, además de fácil este título de Nintendo es para ti.